Comenzará Construcción de Prototipo de Eco-Paneles Realizados con Desechos de la Acuicultura
- Proyecto es desarrollado por investigadora de la UCN y financiado por el Gobierno Regional de Coquimbo.
La Escuela de Prevención de Riesgos y Medioambiente de la Universidad Católica del Norte (UCN) comenzará en los próximos días a construir un muro con residuos de la acuicultura, prototipo que es parte de la investigación “Desarrollo de Eco-paneles con residuos de la acuicultura”, liderada por Begoña Peceño Capilla, Directora de la Escuela de Prevención de Riesgos y Medioambiente de la UCN.
Cabe destacar que el objetivo del proyecto es desarrollar eco-paneles sostenibles para la industria de la construcción, con residuos acuícolas, específicamente conchas, generando un subproducto valorizable en la industria de la acuicultura, en el marco de la economía circular.
De esta manera se construirá un muro de tabiquería de 2,2 x 2,4 metros, resistente al fuego, característica que será certificada mediante un ensayo de resistencia al fuego, el que se realizará en el laboratorio que certifica la resistencia al fuego de los paneles para construcción comercial.
Begoña Peceño, quien realizó la entrega de los avances del proyecto en un seminario, destacó que, con la investigación realizada hasta la fecha, se estableció que es posible trabajar con los residuos de los diferentes moluscos, sin la necesidad de separarlos, “podemos hacer una planta que gestione todos estos residuos, independiente de si se trata de machas, ostiones o locos”, enfatizó.
Trabajo conjunto
El proyecto es financiado por el Gobierno Regional de Coquimbo, a través del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC-R), y se desarrolla en colaboración con empresas generadoras de residuos y empresas de la construcción, representadas por Invertec Ostimar, Caleta de San Pedro, Cooperativa M31, Transforma MÁSMAR, el Programa Estratégico Regional Industria de la Miticultura de Chile de la Región de los Lagos y la Cámara Chilena de la Construcción.
Tatiana Castillo González, Consejera Regional de la Región de Coquimbo, dijo que el mundo académico tiene que estar siempre ligado a la ciudadanía, y agregó que “la vida entera está ligada, necesitamos de los científicos y de los avances tecnológicos”. Junto con ello, la autoridad regional recalcó “estamos viendo cómo reutilizar desechos que dañan nuestro ecosistema, porque por mucho que los moluscos sean naturales, las conchas se botaban. Al reutilizarlo, mezclarlo en la construcción, bajando el deterioro de la naturaleza, estamos cuidando la naturaleza. El mundo académico y científico es fundamental para nosotros”.
La reutilización de este residuo puede reducir los costos generados por ser disposición final en rellenos sanitarios y permitiría contar con materiales para la construcción, más económicos.
Al conocer los avances del proyecto, Guillermo Molina, Gerente de Transforma MÁSMAR afirmó que hay muchas esperanzas puestas en la iniciativa. “Hoy día lo que estamos haciendo es botar materia prima, y lo que tenemos que hacer es pensar que esta es una nueva materia prima. Las conchas se integran perfectamente a este mundo de la construcción, a través de los paneles”, resaltó el Gerente de Transforma MÁSMAR.
En tanto el Dr. Wolfgang Stotz Uslar, Secretario de Investigación de Sede Coquimbo de la UCN, destacó que la UCN realiza un trabajo transversal, que parte desde las ciencias básicas, y genera el conocimiento que permite desarrollar ideas que pueden ir resolviendo problemas de la comunidad. En ese marco esta investigación, dijo, generó toda la información básica necesaria y ahora puede proyectar su aplicación a algo práctico, como es la construcción. La universidad debe integrar y tener una visión global, no sólo lo referente a lo inmediato, sino que todo lo que implican los posibles impactos o costos para el ambiente y la sociedad, resaltó el Dr. Wolfgang Stotz Uslar.
El proyecto se alinea con los principios de la economía circular, preservando el capital natural, evitando la extracción de recursos naturales, en este caso el yeso. Además, optimiza el uso de los recursos, reciclando un residuo y fomenta la eficacia del sistema productivo de la Región.