Autoridades persistirán en planes de mejora para la congestión vial en la conurbación y Ovalle
- Plan de gestión de tránsito para hacer frente al retorno a clases, involucró suspensión de estacionamientos, monitoreo por televigilancia y despliegue de fiscalizadores de la Seremi de Transportes.
Según mediciones de flujo que realiza la Unidad Operativa de Control de Tránsito, en un 10% aumentó el flujo vehicular la mañana de este lunes, en medio del retorno a clases luego de vacaciones de invierno.
Y es que el llamado “Super Lunes” impuso el desafío de implementar un trabajo planificado para hacer frente al aumento del parque vehicular en las horas punta. Jornada que fue supervisada en terreno por el Delegado Presidencial Regional, Galo Luna Penna, quien sostuvo que “ha sido un trabajo arduo que hemos estado realizando anticipadamente. Levantamos una mesa regional por la movilidad del transporte, donde pudimos conversar con los municipios, les solicitamos que tomaran algunas medidas como la instalación de nueva señalética o reforzar lo existente y lo mismo que el demarcado de las calles, porque uno de los problemas que detectamos era que mucha gente no estaba respetando las señales de no estacionar, lo que provocaba sobre todo en el centro de La Serena, donde tenemos 16 mil estudiantes que ingresan a los establecimientos, más los trabajadores, los docentes, que ocupan las vías para estacionar y congestionan el centro de la ciudad”.
Si bien se reportaron algunos semáforos apagados, que fueron reiniciados durante la jornada, y congestión en algunos puntos complejos, la movilidad se comportó de acuerdo a lo esperado, sin generar mayores inconvenientes. “Se logró parcialmente llegar con los compromisos acordados en la mesa. Pero vamos a tener una nueva reunión para poder reforzar algunos elementos, porque necesitamos cambiar la conducta vial de los ciudadanos y ciudadanas, sobre todo en el centro. El día de hoy estuvo bien dentro de lo esperado, nosotros sabemos que se van a producir problemas de congestión, pero lo importante es trabajar en las distintas medidas”, remarcó el Delegado Luna.
Al menos en la conurbación, Carabineros ha definido 20 puntos de mayor complejidad, 11 en La Serena y 9 en Coquimbo, en ellos, y en las principales arterias de ambas comunas, se aplicó un plan de gestión de tránsito, con suspensión de estacionamientos, monitoreo por drones de la Unidad Operativa de Control de Tránsito, Seguridad Pública y los fiscalizadores de la Seremi de Transportes.
En esta línea la Seremi Alejandra Maureira añadió que “hemos visto que aún cuando tenemos datos de que hubo un aumento en la movilidad desde las 06:00 hasta las 09:00 de la mañana, el comportamiento vial ha sido normal, y este trabajo corresponde a la coordinación que hemos gestionado y llevamos todo el año realizando, y con especial foco en este regreso a clases. También señalar que estuvimos en terreno monitoreando el transporte público que mostró un buen comportamiento en términos de frecuencia de las líneas, buses que estuvieron saliendo con regularidad, la variante 20 que fue uno de los servicios que estuvimos coordinando el año pasado con Lincosur estuvo respondiendo de buena manera”.
Mientras que el General de Carabineros Juan Muñoz, acotó que “la congestión no la vamos a acabar de un día a otro, sino que esto obedece también a un cambio cultural de nuestras conductas como conductores, como peatones y pasajeros, y también al mejoramiento de la infraestructura vial que hay actualmente. El llamado principal es que la gente entienda que las señalizaciones están instaladas con un criterio técnico, y por lo tanto tienen que ser respetadas. Ahora, si no las respetan, evidentemente tanto como inspectores municipales, o carabineros, pueden eventualmente cursar la infección”, sostuvo el Jefe de Zona.
Parte del trabajo de gestión también pasó por el monitoreo efectuado por la Unidad Operativa de Control de Tránsito UOCT que hoy registra un 77% de los semáforos conectados al centro. Por ello es que se están realizando gestiones para tener más semáforos y cámaras para mejorar el estado de la movilidad, convirtiendo a la tecnología en un elemento clave para darle mayor fluidez al transporte en las ciudades.